Ya eres adulta: puedes votar, tienes un trabajo hace tiempo y tomas decisiones importantes todos los días. Pero aún con ese mundo exterior lleno de exigencias y desafíos propios de la edad adulta, sientes que en el fondo no has dejado atrás a tu niña interior.
Si tienes la sospecha de que aunque todo indique lo contrario, eres una niña atrapada en un cuerpo de adulto, sigue leyendo.
1. Podrías pasar horas haciendo esto
2. Tomar siestas es tu pasatiempo favorito
3. Así luce tu refrigerador un día cualquiera
4. Cuando alguien hace algo tonto, aún dices “daah”
5. Así te sientes cuando hablas con un ejecutivo del banco
6. Tus bebidas alcohólicas favoritas son muy dulces
7. En lugar de comer lo que debes, siempre terminas con cereal y leche
8. Cada lunes es la misma escena
9. Tu pasillo favorito en el supermercado es el de los dulces
10. Tomar decisiones importantes no es lo tuyo
11. Cada vez que recibes un regalo, la emoción es la misma
12. Ésta es tu idea de cocinar
13. Cuando vas al súper, tienes esto en mente
14. Y terminas así
15. Te gusta jugar con tus sobrinas para peinar sus muñecas
16. Cantas a gritos y a veces hablas sola
17. Nunca lo admites, pero te sabes todos los diálogos de las películas de Disney
18. Vives con miedo de que un día tu jefe sepa que en realidad eres una chica de 11 pretendiendo ser adulta
19. Amas las fiestas de pijamas
20. Tienes serios problemas para ajustarte a un presupuesto
