La idea que se tenía de cómo debía ser una familia cada vez está más obsoleta. Hoy en día, las encontramos de todas formas y tamaños. Además, ya no hay una sola manera “correcta” de vivir en pareja y formar una familia.
Shelley Hunt es una mujer de 38 años que tiene dos hijos y vive con su pareja, Peter Verge, quien tiene tres pequeños. El hogar de la familia es una casa compuesta por dos suites independientes, donde Shelley vive en una de ellas con sus hijos, mientras que Peter y sus retoños viven en la otra.
Juntos pero no revueltos
Aunque esto pueda parecer extraño, ha funcionado perfectamente para ellos. Cada suite tiene su entrada independiente y perfectamente equipada con su propia cocina y baños. La suite de Shelley tiene dos cuartos y un baño, mientras que la de Peter, tres habitaciones y dos baños. Hay espacios compartidos: un pasillo y el cuarto de lavado.
El tiempo con sus hijos no es compartido a menos que haya alguna actividad especial, como una noche de juegos o cenas todos juntos, que tratan de tener dos veces a la semana.
“No era sabio vivir todos juntos”
Entonces se puede decir que la pareja vive “separadamente junta”. Cada quien tiene su espacio y puede poner sus reglas con sus hijos y ha funcionado muy bien para ellos.
He vivido incendios y divorcios y muchas mudanzas/transiciones, y esperaba asentarme con mis hijos a largo plazo. Nuestra relación era muy nueva, así que vivir juntos con cinco hijos no parecía muy sabio, ni para ellos ni para nosotros. Entonces, cuando encontré esta casa, no podía creer lo adecuada que era para dos familias. Estaríamos cerca, pero cada quien tendría su espacio. Vimos la casa una vez e hicimos nuestra oferta. El resultado fue que ambos gastamos menos dinero que si hubiéramos comprado por separado.
Al vivir de esta manera, cuestiones como los gastos del hogar, la repartición de tareas, etc., no son fuente de conflicto entre la pareja. Shelley incluso dice que esa es la mejor parte de su arreglo de vivienda: que cada uno sabe perfectamente cuáles son sus responsabilidades. Manejan sus finanzas por separado y, como la suite de Peter es más grande, el paga un porcentaje un poco más alto de la hipoteca y servicios.
Sabemos exactamente cuáles son nuestras responsabilidades y manejamos nuestros asuntos. Cada quien es responsable por sus propios hijos y por su propia suite. Me aseguro de que todos los días mis hijos estén listos para la escuela, que desayunen, que vayan a sus actividades extracurriculares, a sus citas con el médico, que cenen y que tengan todo lo que necesitan. Igual Peter. Cada quien limpia su propio espacio. Cada quien busca quien cuide a sus hijos. A veces le pedimos ayuda al otro, pero eso es lo que es siempre: una petición.
Les ha funcionado de maravilla
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Shelley dijo en una entrevista con Buzzfeed que cree que esta manera de vida ha permitido que su relación con Pete se fortalezca y por ello todos se llevan bien, incluidos sus hijos. Además, ha descrito el lazo que tiene con los hijos de Peter como “increíble”.
Nuestra relación empezó muy fuerte y este acuerdo definitivamente nos ha ayudado a mantener el respeto, amor, consideración y romance. Nuestra comunicación es increíble porque, repito, no nos pusimos en una situación en la que haya expectativas intrínsecas y así nos ahorramos muchas decepciones.
El lazo que tengo con los hijos de Peter es increíble y me sorprende cómo todos los niños nos han aceptado. Se dicen ‘hermanastro’ entre ellos, y a nosotros nos dicen ‘madrastra’ o ‘padrastro’, y se refieren a todos nosotros como una familia. Todo esto fue completamente iniciado por ellos, Peter y yo no los forzamos. Amo su habilidad de aceptar algo que no es tradicional y desarrollarse tan bien en este ambiente. No saben cómo se ‘supone’ que deben ser las cosas, pero sí reconocen la felicidad, la salud y el amor cuando lo sienten.
“Todas las familias merecen ser celebradas”
Shelley comparte su estilo de vida en TikTok y ha recibido, mayoritariamente, respuestas positivas y lo atribuye a la diversidad de familias que vemos actualmente, lo que es algo muy positivo.
¿Podemos parar de decirle a los niños que no están completos porque su familia no se ve de una manera particular? Nuestras ideas de lo que es una familia han sido muy excluyentes. ¿Quiénes somos si nuestras familias no son tradiciones? ¿Acaso somos menos? ¡No! Todos merecen sentirse incluidos. Todos los tipos de familia cuentan y merecen ser celebradas.
