Cuando tratamos de ponernos en forma solemos usar una báscula para medir nuestro progreso, pero hay ciertas razones por las que esto no es una buena idea. Probablemente la principal sea que la báscula solo nos dice cuánto pesamos, pero no la composición de nuestro cuerpo, que es la proporción de grasa y músculo que hay en nosotras.
Y para que este argumento sea más convincente, hemos recopilado una serie de fotos de antes y después de personas con el mismo peso, pero con una silueta muy distinta.
1. La regularidad a largo plazo vence cualquier obstáculo
2. Todo depende de tu fuerza de voluntad
3. De la manera en que te alimentas y cuidas tu cuerpo
4. La báscula nunca ha sido el reflejo de tu salud
5. Ya que tener poco o mucho peso
6. No es sinónimo de una buena calidad de vida
7. Sin embargo, un poco de ejercicio, ensaladas e incluso algunos postres
8. Son la fórmula perfecta para una vida en equilibrio
9. En la que lo más importante es disfrutar
10. Sin importar lo que diga la báscula
11. Ya que poco refleja el esfuerzo que compone tu silueta
12. Así que el próximo año haz realidad tus propósitos
13. Y recuerda que solo se necesitan 21 días para crear un hábito
14. Y obtener la silueta que siempre has deseado
