Todos las personas somos el reflejo de nuestros padres, muchas veces inconscientemente. Pero en el caso del príncipe Harry el parecido que tiene con su madre es realmente increíble, sobre todo en esa humildad que la caracterizaba.
Hemos sido testigos de todas las hermosas muestras de cariño que tiene con las personas que lo rodean, como cuando saludó a una anciana que siempre acude a sus visitas en Australia; o cuando descubrió a una tierna ladrona de palomitas, o la creación de los Invictus Games para los soldados heridos en combate.
Un encuentro fortuito
Hace algunos meses, Harry tuvo la oportunidad de conocer a Ollie Carroll, un pequeño de seis años de Poynton, Cheshire, quien sufre de una enfermedad llamada Batten, la cual lo ha dejado imposibilitado para hablar o caminar. Este mal también le fue diagnosticado a su pequeña hermana Amelia, de tan solo tres años.
El encuentro se dio durante los premios WellChild, en ese momento, el niño reunió todas sus fuerzas para poder sostenerse y abrazar al príncipe, lo que conmovió en extremo al joven de la realeza y a los padres de Ollie, quienes pensaban que nunca más sería capaz de levantarse.
¡Finalmente una esperanza!
La madre del niño, Lucy, declaró que el encuentro con el príncipe había sido algo realmente mágico y creía que en ese momento surgió un lazo entre ambos. Unos días después, publicó en su cuenta de Facebook lo siguiente:
Algunas semanas después de la premiación, hemos recibido la maravillosa noticia de que a Ollie y a Amelia se les ha concedido el acceso al uso compasivo de un tratamiento pionero para la enfermedad de Batten. ¡Finalmente tenemos un poco de esperanza! Nos sentamos y le escribimos una carta al príncipe Harry explicando nuestra alegría. Le agradecimos por darle a nuestro hijo la fortaleza para pararse cuando pensábamos que esto ya no era posible.
Una visita inesperada
Días más tarde, Ollie y Amelia se encontraban en el Great Ormond Street Hospital recibiendo su tratamiento y tuvieron una visita muy especial: Harry solicitó tener un encuentro privado con los hermanos, un momento que los padres de los pequeños recordarán para siempre.
Los pequeños estaban felices
Por una hora, el príncipe Harry se sentó con nosotros, platicó y jugó con nuestros hijos, se rieron mucho y crearon recuerdos para siempre. Lo que nuestros pequeños desean más en la vida es ser felices y divertirse. Nos sentimos tan orgullosos de saber que Ollie y Amelia están tocando la vida de las personas que conocen con su amor y fortaleza. El amor, el apoyo y la risa dentro de la sala de tratamiento se quedarán con nosotros para siempre. Desde el fondo de nuestros corazones agradecemos al príncipe Harry por su apoyo, su tiempo y su amabilidad hacia nuestra familia y nuestro viaje con la enfermedad de Batten.
Un hermoso déjà vu
Algunas fotografías del encuentro fueron publicadas en las redes sociales, en ellas se aprecia al Príncipe sosteniendo en sus brazos al pequeño Ollie, un momento realmente tierno y muy parecido a una imagen en donde su madre abrazaba a un niño enfermo en un hospital de Bangladesh.
La lucha continúa
Ollie también tuvo la oportunidad de conocer a Ed Sheeran en el backstage antes de un concierto en Manchester. La estrella decidió subir al escenario con una banda roja en su muñeca para promocionar a la fundación Ollie’s Army, creada con la finalidad de concientizar a las personas sobre la enfermedad y poder financiar su investigación.
