El 31 de enero, la Fiscalía de Distrito de Nuevo México, Estados Unidos, formalizó los cargos de homicidio involuntario contra el actor Alec Baldwin por la muerte de la directora de fotografía Halyna Hutchins durante el rodaje de la película Rust en octubre de 2021.
La presentación se produce casi dos semanas después de que la fiscal de distrito Mary Carmack-Altwies anunció su plan para seguir adelante con la imputación de cargos penales contra Baldwin, así como contra Hannah Gutiérrez-Reed, la armera y encargada del protocolo de seguridad en el rodaje, quien cargó físicamente el revólver Colt 45 entregado al nominado al Óscar.
Según los documentos judiciales con las graves acusaciones, Baldwin actuó “extremadamente” negligente de muchas maneras, pues como actor y productor de la película, incumplió numerosas normas de seguridad. De igual manera, la Fiscalía de Distrito presentó cargos similares contra Hannah Gutiérrez-Reed.
En octubre de 2022, el actor y los productores habían anunciado un acuerdo legal con el viudo de Halyna Hutchins, esperando no ir a juicio, una vana esperanza que en realidad no evitará que Baldwin sea procesado.
Ahora tanto Baldwin como Gutiérrez-Reed estarían por enfrentarse a un juicio por la vía penal. Si son declarados culpables, ambos enfrentarían hasta 18 meses de cárcel y una multa de cinco mil dólares.
Sin embargo, si son declarados culpables con circunstancias agravantes, es decir, si el cargo incluye el uso de arma de fuego, la pena podría ser de hasta cinco años de prisión. Por ahora, los dos acusados deben comparecer ante la jueza dentro de 30 días, aunque también podrán hacerlo a través de videoconferencia.
