La edición 91 de los Premios Óscar tuvo momentos para todos los gustos, desde reivindicaciones hasta chistes que no consiguieron hacer reír al público. Pero hubo uno que fue aplaudido por todos y su protagonista fue Chris Evans.
El actor de Marvel se convirtió en un verdadero héroe luego de prestarle el brazo a Regina King y ayudarla a llegar sana y salva a recoger su estatuilla.
Internet cayó rendido ante el gesto de caballerosidad que Evans tuvo con King, pues no dudó ni un segundo en ayudarle cuando ella se disponía recoger su Óscar como Mejor Actriz de Reparto por El blues de Beale Street.
Al acercarse al escenario, King casi tropieza al enganchar uno de sus tacones con la falda de su vestido; de haberse caído pudo haber sido un momento más aparatoso que el de Jennifer Lawrence en 2013. Afortunadamente Evans estaba a su lado y, cual Capitán América, salió en su rescate y no tardó ni un segundo en ofrecerle su brazo para que se apoyara, acomodara su vestido y subiera sin problema al escenario.
La primera en reconocer su gesto fue la actriz Jamie Lee Curtis
De inmediato Twitter llenó de halagos a Evans
Nos hizo recordar por qué lo amamos tanto
Incluso, desear ser así de afortunadas
Por lo pronto, todas coincidimos en algo…
Ahora tenemos una razón más para amarlo
