Cerramos el año con una noticia muy lamentable. La renombrada actriz de Hollywood Betty White, mejor conocida por su actuación en el programa de comedia Los años dorados, falleció el 31 de diciembre de 2021. Betty fue una de las actrices más queridas de todos los tiempos y su brillante carrera en la comedia será recordada por muchos años.
La actriz falleció a menos de un mes de cumplir 100 años – los hubiera cumplido el 17 de enero – y no solo se dedicó a repartir felicidad y risas durante toda su carrera, sino que también vivió de manera alegre y llena de dicha. Y estos fueron algunos de los consejos que dio para poder llegar a casi un siglo de vida.
Disfrutó de cada momento
Betty siempre aseguró que su secreto más importante para tener una vida larga y feliz era vivir de manera muy optimista. La actriz fue muy alegre y se describía como una persona que trataba de encontrarle un lado positivo a las cosas, un hábito excelente que heredó de su mamá.
¿Cuál fue el mejor consejo que dio esta queridísima mujer que casi llegó a los 100 años? La respuesta es simple: Disfrutar de cada momento. La actriz siempre se mantuvo fiel a sus propios consejos y celebraba cada día.
Siempre se enfocó en lo positivo
En repetidas ocasiones, la actriz insistió en la importancia de ver la vida de una manera alegre. En 2018 aseguró en una entrevista que lo más importante en esta era disfrutarla.
Hay que resaltar los aspectos positivos. Suena trillado, pero mucha gente busca cosas de las cuales quejarse en lugar de decir ‘Oye, ¡eso fue muy bueno!’. No es difícil encontrar cosas positivas si las buscas.
“Betty vivió una vida feliz”
Las personas más queridas y allegadas a la actriz pueden confirmar que ella siempre estaba de buen humor y que su vida siempre estuvo llena de risas y alegría. Su agente y amigo Jeff Witjas dijo lo siguiente:
Betty es feliz. Ella siempre piensa en los demás primero y se mantiene positiva pase lo que pase, ¡incluso cuando la derroto en nuestro juego favorito, gin rummy!
Betty vivió sus últimos años de manera muy tranquila en su residencia de Los Ángeles, California. En la reta final de su vida, descubrió su amor por los juegos de habilidad mental como crucigramas y cartas. Además, se mantuvo activa jugando golf. Por otra parte, era una gran amante de los animales y disfrutaba mucho de ver documentales acerca de ellos. De hecho, dedicó mucho de su tiempo al cuidado de estos y era miembro del Centro de Aprendizaje de Vida Silvestre y del Acuario de la Bahía de Monterey, en donde se realizan labores para fomentar la protección de las diferentes especies.
“Trato de evitar cualquier cosa verde”
La alegría de Betty siempre fue contagiosa e incluso en sus últimos años, la actriz disfrutó de hacer reír a la gente. Cuando le preguntaban acerca de sus hábitos alimenticios, ella decía que “evitaba cualquier cosa verde” y que sus dos comidas favoritas eran el vodka y los hot-dogs “en ese orden”.
Se trata, sin duda, de una pérdida muy lamentable, ya que además de ser una actriz muy talentosa, Betty era un ser humano muy noble. ¡Te extrañaremos, chica de oro!
