El príncipe Harry, Meghan Markle y su madre, Doria Ragland, se vieron envueltos en la que ha sido descrita como una “persecución automovilística casi catastrófica” tras ser perseguidos por paparazis en la ciudad de Nueva York, Estados Unidos.
El 16 de mayo por la noche, Meghan Markle estuvo en la Gran Manzana para aceptar un premio Women of Vision de la Ms. Foundation. Estuvo acompañada por su esposo, el príncipe Harry, y su madre, Doria Ragland. Este fue el primer evento público al que la duquesa de Sussex asistió tras ser vetada de la coronación del rey Carlos III.
Al día siguiente, a través de un comunicado emitido por el portavoz de la pareja real, se informó que Harry y Meghan estaban extremadamente molestos y conmocionados luego de que los tres fueron perseguidos por unos 12 paparazis “agresivos” durante dos horas en una persecución casi catastrófica que provocó varias colisiones.
Según la prensa estadounidense, la pareja y la madre de Meghan viajaban en un automóvil particular. En medio de la persecución, el vehículo se detuvo en la comisaría del distrito 19 del Departamento de Policía de Nueva York para abordar un taxi conducido por un hombre de origen indio llamado Sukhcharn “Sonny” Singh.
If anything happens to Harry and Meghan, these paparazzi and the owners of these Tabloids with king Charles and William, should be held responsible and prosecuted to the fullest extent of the Law. pic.twitter.com/QCPgNGeimy
— sussexopulence (@sussexopulence) May 17, 2023
En una entrevista para la BBC, Singh dijo que su taxi fue bloqueado por un camión de basura y fue entonces cuando los paparazis comenzaron a tomar fotografías. Cuando estaban a punto de darle la ubicación de su destino, le dijeron que los llevara de regreso a la estación de policía porque se sentían más seguros allí.
Además, Singh también le dijo a la BBC y a varios otros medios de comunicación que la terrible experiencia en el taxi duró unos diez minutos y que no lo describiría como una “persecución”. El conductor dijo que la pareja se veía “nerviosa”, pero nunca sintió que él o alguien más estuviera en peligro.
No creo que lo llamaría una persecución. Nunca sentí que estaba en peligro. No era como una persecución de coches en una película. Estaban callados y parecían asustados, pero es Nueva York, es seguro.
Por su parte, la policía afirmó que numerosos fotógrafos hicieron que el viaje fuera un desafío, pero que Harry y Meghan llegaron a su destino sin reportes de accidentes, lesiones o arrestos. La revista People citó a uno de los fotógrafos involucrados en la escena, quien reveló que es “exagerado” describir el incidente como “casi catastrófico”.
Incluso el alcalde de Nueva York, Eric Adams, dijo que le resultaba difícil creer que había sido una persecución de dos horas, de manera que las autoridades averiguarían la duración exacta del incidente.
Hasta el momento, los portavoces del Palacio de Buckingham no han comentado nada sobre el incidente, aunque se espera que no lo hagan, como ha ocurrido desde que el príncipe Harry y Meghan Markle abandonaron oficialmente sus deberes reales.
