Cuando nos teñimos el cabello, lo hacemos por dos razones: cambiar de look o cubrir las canas. Pero cambiar el color no es tan sencillo como parece, por eso siempre se recomienda ir con un profesional, aunque las personas no siempre siguen esta pequeña regla.
Para demostrar que no es bueno tener una cajita de tinte en casa y hacerlo por ti misma, te presentamos el caso de Kinsey Dixon, quien demostró que tienes que leer muy bien las instrucciones o, de lo contrario, podrías terminar con el cuerpo y hasta el baño pintado de color azul.
Si vas a teñir tu cabello, es mejor hacerlo con un profesional
La usuaria de TikTok Kinsey Dixon publicó un video en su cuenta para contar cómo todo se salió de sus manos cuando intentó teñir su cabello utilizando una cajita de tinte comercial. La chica solo quería hacer todo desde la comodidad de su casa, pero se olvidó de un pequeño detalle: leer las “instrucciones”.
Todo iba bien, pero una vez que tomó una ducha, terminó totalmente azul
En lugar de solo enjuagarse el cabello debajo del grifo, como sugieren las instrucciones de cualquier tinte comercial, Dixon decidió que era mejor meterse a la ducha de cuerpo entero. Todo iba muy bien, pero cuando abrió los ojos después de enjuagarse, se dio cuenta de que su cuerpo estaba pintado de color azul.
Hasta la ducha terminó pintada de azul
Aunque eso no es todo, pues la chica también transformó su ducha, porque terminó pintada del mismo color que su cuerpo. Todos se preguntan cómo llegó a eso, pero ni ella tiene la respuesta, solo sabe que su video ya se hizo viral y obtuvo más de 18 millones de vistas.
Ella solo quiere saber si creen que su abuela lo note
Mientras está contando su experiencia, se puede escuchar decir: “¿Crees que mi abuela se dará cuenta de que me teñí el pelo?”.
Después publicó una actualización de la situación informando que su abuela no estaba tan molesta por la situación y que con mucho esfuerzo y varias duchas pudo eliminar todo el color de su piel. Por otro lado, se ganó el apodo de “Pitufa” en el trabajo, porque tuvo que asistir varios días luciendo muy azul. Y lo mejor de todo es que nos dejó una importante lección: leer muy bien las instrucciones antes de usar cualquier producto.
