Durante mucho tiempo, vimos en Kanye West y Kim Kardashian a una pareja sólida, enamorada y muy fuerte, pero poco a poco los problemas en su relación se hicieron evidentes y dejaron al descubierto que no vivían el mundo de ensueño que todos creían.
Desde antes de que Kim solicitara el divorcio, ya había muchas banderas rojas en la relación y debido a una fan que recopiló una serie de videos, ahora conocemos los momentos más “tóxicos” que ocurrieron entre la pareja cuando estaban casados. A continuación te los mostramos.
La primera red flag se dio cuando Kanye cambió el estilo de Kim
Cuando iniciaron su relación, Kanye botó a la basura toda la ropa de Kim para cambiar su estilo, pues él consideraba que era el peor. Obviamente la hizo llorar. Después le advirtió que solo usaría prendas que él aprobara, o sea, simplemente ella no podía salir a la calle sin que él le dijera qué usar. Lo mismo hizo con su última pareja, Julia Fox, cuando le regaló un armario con prendas que él escogió. Por fortuna, ella se dio cuenta de que no quería ese tipo de control y se separaron, pero está haciendo lo mismo con su actual novia Chaney Jones, la “clon” de Kim.
El pleito por el vestido del Met Gala
El vestido que usó Kim en la Met Gala del 2019 fue icónico y se quedó en la mente de todos, pero para ella no fue sencillo usarlo. En primer lugar, le tomó varias horas que se lo pusieran y, en segundo, a Kanye no le pareció en lo absoluto que ella lo usara.
Una noche antes, Kanye le dijo que “le dañaba el alma” que ella se vistiera tan sexi y destapada en público. Por su parte, Kim lo enfrentó y le recordó que fue él quien la empoderó a sacar a relucir su sensualidad y a presumir su figura. Ante esto, el rapero mencionó que estaba en una nueva etapa de su vida, una en la que Dios y la religión son más importantes. Claro que a Kim no le importó y terminó por usar el vestido que la convirtió en una sensación durante esa noche. Además, se veía increíble.
Kanye veía a Kim como su “objeto más preciado”
Durante una entrevista, la pareja abrió las puertas de su casa para responder diferentes preguntas y mostrar la manera en que vivían. Hasta ahí todo iba bien, pero cuando le preguntaron a Kanye cuál era su “posesión” más preciada de la casa, él respondió que Kim, como si ella fuera un adorno más o como si ella fuera de su propiedad.
Llevaba al límite sus discusiones, incluso pelearon por un curita
Una vez, durante el programa de Keeping Up with the Kardashian, Kim le contó a su hermana Khloé que ella y Kanye habían discutido por el color de un curita para cuidar una herida. Kanye quería una que fuera específica de su color de piel y ella corrió por toda la casa tratando de buscarla, pero no encontró alguna y él le dijo que lo hizo sentir ridículo y ofendido cuando no la encontró.
Después del divorcio, la quería seguir controlando
Luego de que se separaron, Kanye continuó usándola para promocionar sus discos y giras, incluso se dio el lujo de “aprobar” el monólogo que Kim dio en Saturday Night Live. Además, la acusó de prohibirle ver a sus hijos, constantemente se burla de la nueva relación de su ex y hasta ha bromeado con que “Pete Davidson debería morir”. Todavía sigue creyendo que es suya y por eso hasta se consiguió una mujer idéntica a Kim.
Definitivamente, lo mejor que Kim pudo hacer fue alejarse de esta persona. Ahora hasta los fans celebran que haya podido eliminar el “West” de su vida. A continuación te dejamos el video para que veas todas esas red flags.
