“Un error lo comete cualquiera” o “nadie es perfecto” son frases que a menudo utilizamos cuando ya la regamos para justificar nuestros errores, y aunque es verdad que todos metemos la pata de vez en cuando, hay algunas equivocaciones que se pueden evitar.
Tal vez si tuviéramos la suficiente comunicación entre nosotros no habría tantos errores, pues algunos de ellos se deben a que nos falta corroborar cierta información de alguna parte. Tal como le pasó a un pintor, que ya iba a medio trabajo cuando le dijeron que estaba pintando la casa incorrecta.
Esta situación se dio a conocer mediante la red social TikTok, donde el usuario @antofat subió el video en el que se ve a un pintor muy entrado en su trabajo, incluso ya llevaba la mayor parte de una casa pintada, hasta que llegan a decirle que esa casa no era.
El pintor mira desconcertado al hombre y le asegura que a él le indicaron pintar la casa de la esquina, a lo que el usuario lo convence de que está en un error, pues la casa que tenía que pintar era la que estaba enfrente.
Luego Antofat le pregunta al pintor quién le autorizó pintar esa casa de la esquina, a lo que él señala a otro hombre que se ve igual de confundido. El tiktoker le pregunta que él quién es para autorizar el trabajo, a lo que el pobre hombre le responde “el que le alquila los andamios”.
Toda esta situación de confusión fue bastante graciosa y de inmediato se hizo viral en la plataforma, llegando a más de un millón de visualizaciones y cientos de comentarios donde unos se reían y otros contaban anécdotas similares.
@antofat Era la otra casa 😡#pintaconcpp
Al final del video aparece un vecino, a quien el usuario del video le comenta la situación, por lo que este solo atina a reírse de lo sucedido, mientras que tanto el pintor como el que le rentó el andamio se ven muy confundidos a pesar de que estaban seguros de que esa era la casa que les habían indicado.
Por fortuna, después se descubrió que les habían jugado una broma y nunca se equivocaron de casa, pero el usuario ya tiene una serie videos que incluso titula como “molestando a los pintores”, donde les hace creer que se han confundido de propiedad para ver sus reacciones.
Aunque todo fue parte de una broma, no podemos negar que fue graciosa, sobre todo por las reacciones de los trabajadores, pues no tienen precio. Lo bueno es que debieron sentir un gran alivio una vez que les dijeron que en realidad no estaban equivocados.
