Quizá tu intención no es ser ni parecer mala y solo tuviste la suerte de nacer con el conocido resting bitch face o “cara de enojada”; tal vez tu carácter sí sea un poco explosivo y cualquier cosa te saca de tus casillas. De cualquier manera, la gente te percibe como una mujer intimidante y durante casi toda tu vida has tenido que soportar cierto tipo de comentarios.
“Cuando te conocí me caías mal” o “¿por qué estás enojada?” son frases que escuchas más seguido de lo que te gustaría. Pero es que tienes una manera de ser tan ruda que las personas a tu alrededor se sienten un poquito incómodas. Si eres ese tipo de chica seguramente podrás sentirte familiarizada con estas situaciones.
1. Constantemente te preguntan si estás enojada, pero no tienes la culpa de que así sea tu cara
2. Aunque cuando sonríes asustas más a la gente
3. Abrirte camino no es nada difícil pues todos se apartan cuando te ven
4. E incluso evitan hacer contacto visual
5. “Cuando te conocí me caíste mal” es una frase que escuchas muy seguido
6. La gente prefiere no pedirte consejos porque temen que seas demasiado sincera
7. Tu sarcasmo y negro sentido del humor te hacen ver completamente insensible
8. Cuando tu aterradora reputación entra a una habitación antes que tú
9. Suelen decirte que eres agresiva
10. O peleonera
11. O temible
12. A menudo tu confianza es confundida con arrogancia
13. Si te niegas a aceptar comportamientos infantiles, la gente infantil dice que eres mala
14. Las personas voltean a ver tu reacción ante una situación desesperante porque asumen que perderás los estribos… ¡y sí!
15. Tus amigos saben que durante momentos estresantes puedes manejarlo todo
16. Todo el tiempo te comparan con gatos porque creen que son igual de insensibles
17. Ligar es lo más difícil del mundo porque tu crush ya ha asumido que lo odias
18. Aun así no cambiarías nada, ¡porque eres fabulosa!
