En ocasiones, las personas de la tercera edad son las que más sufren con la soledad. Muchas de ellas son olvidadas por sus familias en asilos o en hogares. Otra de las terribles situaciones que enfrentan es vivir con una enfermedad sin ser atendidos. Es por ello que el actor Chris Salvatore decidió evitar que su vecina Norma Cook fuera a un hogar de ancianos al adoptarla.
Cook, de 89 años, fue diagnosticada con leucemia hace 10. Aunque se había mantenido estable, su condición empeoró considerablemente durante el 2016, y le han dado pocos meses de vida, por lo que Salvatore está decidido a hacer que se sienta amada todos los días.
Ellos son Chris Salvatore y Norma Cook
Salvatore se convirtió en su cuidador personal después de que los médicos comunicaran a la anciana su pronóstico. En un mes reunió el dinero suficiente gracias a la página GoFundMe, con la etiqueta #MyNeigborNorma, para que la mujer tuviera todos los cuidados que necesita mientras vive sus últimos meses. Durante una entrevista para el sitio web de la revista People, Salvatore dijo:
“El año pasado Norma entró y salió del hospital seis veces, y fue dada de alta por última vez hace dos semanas. No podía ir a casa a menos de que tuviera cuidados en el hogar durante las 24 horas del día. Yo no podía dejarla ir a un hogar de ancianos; ella dijo que prefería morir antes de ir a un lugar como ese”.
La amistad es el mejor regalo
Salvatore la conoció cuando se mudó a su apartamento hace algunos años. Norma vivía justo al otro lado del pasillo y siempre veía al actor por la ventana cuando ella cocinaba.
“Un día le dije: ‘¿puedo entrar y charlar?’. Ella parecía tan dulce. Me ofreció una copa de champán y así fue como surgió nuestra amistad. Yo estaba pasando por una ruptura amorosa en ese momento, estaba deprimido y me senté a charlar con ella durante horas. El hecho de saber que estaba allí escuchándome me hizo sentir mejor; fue capaz de ayudarme en los días más oscuros”.
Una hermosa compañía
Después de conocerse, ambos comenzaron a pasar mucho tiempo juntos, cocinando, hablando y jugando con el gato de Cook, Hermes.
“Nos convertimos en mejores amigos de inmediato. Siempre la escucho cuando me habla sobre moda y de comida la mayoría del tiempo”.
Cook no tiene familia, se divorció a los 43 años y jamás tuvo hijos, así que cuando su salud empeoró, el chico intervino para cuidar de su “alma gemela y mejor amiga”.
Su amistad es más como la de un nieto y una abuela
Como Norma optó por renunciar al tratamiento de cáncer, le pronosticaron pocos meses de vida. Apenas puede ponerse de pie y se debilita rápidamente, aun así Salvatore dice que su amiga parece “feliz”, que está comiendo y ha ganado mucho peso.
“Es consciente de la muerte, habla sobre ello y lo acepta muy bien. Para ella soy el nieto que nunca tuvo, por eso tratamos de pasar todo el tiempo que podamos juntos. Aunque hay días buenos y días malos, nos tenemos el uno al otro”.
“Soy muy afortunado de tenerla. Ella ha cambiado mi vida. Me ha hecho una persona más compasiva y amable. Me siento honrado de pasar sus últimos momentos a su lado”.
La edad es solo un número
“Es curioso, porque algunos piensan que no tengo nada en común con alguien de 89 años, pero la edad no importa, no es algo que me impida conectarme con ella. Nunca se sabe quién podría convertirse en tu mejor amigo.
“Ella es mi mejor amiga. Haría cualquier cosa por ella. Creo que la bondad es una cosa mágica y con amor puedo curar lo que los médicos no pueden”.
