En 2021, Lady Gaga experimentó el terrible secuestro a mano armada de Koji y Gustav, dos de sus tres perros bulldog franceses, luego de que unos ladrones hirieron a su paseador, Ryan Fischer, en Los Ángeles, California, Estados Unidos.
Los canes son tan preciados para la estrella del pop que, a pesar de que en el momento del secuestro se encontraba en Italia filmando La casa Gucci, ofreció 500 mil dólares como recompensa a cualquiera que ayudara a recuperarlos.
Por fortuna, Koji y Gustav fueron devueltos sanos y salvos por una mujer identificada como Jennifer McBride y las heridas de Fischer no pusieron su vida en peligro. Sin embargo, dos meses después del incidente, todo cambió cuando los ladrones fueron detenidos por robo e intento de homicidio.
Lamentablemente, lejos de quedar en el pasado, dos años después, una irónica historia nos devuelve a aquel dramático episodio. En marzo, la mujer que devolvió los bulldogs franceses robados a Lady Gaga tras su violento secuestro en 2021 demandó a la multipremiada cantante por no pagar la jugosa recompensa prometida por la devolución de sus queridos perritos.
Según el expediente, la también actriz supuestamente “defraudó” a Jennifer “haciéndole una promesa sin la intención de cumplirla”, lo que le generó daño moral y ansiedad, así como una pérdida del gusto por la vida debido a la recompensa no pagada.
¿Por qué Lady Gaga no quiere pagar la millonaria recompensa?
Además de los detenidos por el robo de las mascotas, entre ellos también se encontraba una mujer sospechosa de complicidad. Precisamente, se trataba de Jennifer McBride, la persona que le devolvió los perros a la cantante y de quien se descubrió que tenía una relación sentimental con uno de los delincuentes.
Más tarde, Jennifer fue acusada de participar en el robo de los perros de Lady Gaga. Tras enterarse de las acusaciones, la famosa artista de 37 años se negó a pagar el rescate y McBride la demandó.
Mientras tanto, la secuestradora exige que Lady Gaga pague sus honorarios legales, así como una compensación por daños financieros, dolor y sufrimiento, angustia mental y pérdida del disfrute de la vida.
Por su parte, los abogados de la sospechosa argumentan que su clienta “no tuvo ninguna participación en el hecho”. Además, adelantaron la demanda contra la cantante, cuya audiencia por desestimación de la causa se llevará a cabo el próximo 10 de julio, así que habrá que esperar hasta entonces para conocer el desenlace de esta irónica historia, aunque es prácticamente un hecho que el fallo favorecerá a Lady Gaga.