A través de un comunicado de prensa compartido por sus abogados este 26 de junio, Luis Enrique Guzmán, hijo de Enrique Guzmán y Silvia Pinal, informó que no es el padre biológico de Apolo, el hijo que tuvo con su exesposa, Mayela Laguna, por lo que iniciará un proceso legal para la disolución del lazo jurídico que lo une con el niño.
Sin revelar más detalles con respecto al motivo que orilló al hermano de Alejandra Guzmán a realizarse dicha prueba, el documento firmado por el licenciado Francisco Javier Piz informó que el resultado del examen genético dio como resultado que no existe ninguna compatibilidad biológica entre Luis Enrique y Apolo.
Tras ser engañado con respecto a su paternidad y ante lo delicado del tema, el hijo de Silvia Pinal tomó la decisión de iniciar con los trámites para quitarle el apellido al menor, proceso que se dijo que no será nada sencillo, ya que, además de la prueba genética, las autoridades correspondientes llevan a cabo una exhaustiva evaluación de las circunstancias, para así determinar si la disolución del vínculo paterno-filial es lo más adecuado, dependiendo el caso.
Luis Enrique Guzmán Pinal se realizó una prueba en genética molecular con resultados del cero por ciento de paternidad y compatibilidad a partir del desarrollo y aplicación de esta ciencia genetista, entre el menor de iniciales AAGL y el señor Luis Enrique Guzmán Pinal.
Cabe destacar que tras descubrir que Apolo no es su hijo, el afecto que le tiene tanto Luis Enrique Guzmán y su familia al menor no va a desaparecer por arte de magia, pues el cariño nace desde la convivencia y el vínculo que se va forjando con los años. Incluso en la carta expedida se dijo que tampoco se le podrá negar el apoyo económico que tanto él como su familia le quieran brindar.
Aunque hasta el momento ningún miembro de la familia Guzmán o Pinal se ha expresado al respecto, la noticia no tardó en conmover y dar la vuelta en redes sociales, donde un sinfín de usuarios comentaron que era lamentable esa noticia, ya que Alejandra Guzmán apreciaba demasiado al menor e incluso se había dicho que lo tenía contemplado en su testamento.
