Cuando perdemos a alguna de nuestras mascotitas, soñamos con el momento de poder recuperarlas, pues no quisiéramos tener que despedirnos de nuestros fieles amiguitos, pero, sobre todo, nos angustia demasiado no saber cuál pudo ser su destino.

Por eso no pudimos evitar emocionarnos profundamente luego de que, a través de un video, pudimos ser testigos del maravilloso reencuentro de dos inseparables amigos: Don Mario, un abuelito ciego que pide caridad en las calles, y su perrito Peluchín. ¡Se vale llorar!

un abuelito se reencuentra con su perrito se están demostrando cuanto se extrañaron el perrito es de color blanco su dueño lleva una chamarra azul marino y una gorra roja usa un bastón y lentes de sol

La difícil separación sucedió luego de que un extraño se llevó al perrito en su coche, tal vez, pensando que el animalito necesitaba refugio y optó por intentar adoptarlo sin imaginar que el pequeño sí tenía dueño, un humilde abuelito que lo estaba extrañando muchísimo.

Que me hagan la caridad de regresármelo, porque no le deseo a nadie lo que yo estoy viviendo. A ese perrito nomás le falta hablar, se lo puede decir cualquiera de los que lo conocen.

un abuelito abraza con cariño a su perrito quien le sirve como guía y mascota el perrito es de color crema y su dueño lleva una chamarra azul marino con una gorra roja y lentes para sol tiene la barba y el bigote crecidos

Por si fuera poco, el perrito no solo era su compañero inseparable, pues también le servía como perro guía, ya que el abuelito padece ceguera, así que una vez que se las ingeniaron para poderse comunicar entre ellos, cada vez que Don Mario tenía que salir a las calles, Peluchín le iba dando indicaciones con sus ladridos.

Peluchín siempre me acompaña a todos lados, él jamás me ha dejado solo, desde hace seis años ha estado conmigo para todos lados y más porque con gritar su nombre él está conmigo. Es lo único que pido, por favor, regrésenme a Peluchín, es el perro más noble que he tenido, sin importar nada, él siempre ha permanecido a mi lado.

un perrito parado en la calle junto a su dueño lleva un suéter azul para el frío el perrito es de color crema y esta un poco sucio

Los vecinos se organizaron para ayudarlo y pronto su historia se dio a conocer por medio de los noticieros locales, con tan buena fortuna que el peludito pudo regresar con su amigo. La escena de su reencuentro es hermosa. No podemos evitar sentirnos emocionados al comprobar que esta historia tuvo un final feliz.

Ay, papá, mi niño hermoso. ¿’On tabas, papá? ¿’On tabas, mi niño? ¿’On tabas, papá? Gracias, Señor, gracias. ¿’On tabas, mi niño? Papá, ya no te vayas, no te dejes atrapar, ‘apá.