A veces podemos sentirnos tan en confianza con nuestra pareja que decimos cosas sin pensar en las consecuencias: ten cuidado antes de hacer comentarios con los que puedes herir a las personas que más quieres.
Judy Ford, psicoterapeuta y autora de Every Day Love. The Delicate Art of Caring for Each Other (Amor cada día. El delicado arte de preocuparse por el otro) señala en su libro que “hablar con amabilidad es una habilidad que las parejas tienen que aprender. Todos se sienten maltratados por la vida y el mundo exterior. No debes sentirte de esa manera en tu casa “.
Por ello, te compartimos 7 frases que deberías evitar en tu relación:
1. “Eres como tu madre”
La comparación con cualquier familiar, especialmente alguien que no te agrada del todo, es incómodo y ofensivo. Además, según Julie Orlov, psicoterapeuta, conferencista y autora de The Pathway to Love (El camino del amor), pone en evidencia los peores rasgos de la familia.
Debes evitar el insulto y realizar una petición razonable, por ejemplo, si él suele dejar los platos sucios (como alguien de su familia), podrías utilizar alguna frase como: “Amor, cuando hayas terminado tu comida, ¿puedes lavar tu plato?”.
2. “¿Cuando vas a encontrar otro trabajo?”
Primero, asegúrate de estar bien contigo mism@ antes de juzgar a tu pareja. Judy Ford dice: “Una parte de cómo un hombre se evalúa a sí mismo es por lo bien que puede hacerse cargo de su familia”. En este sentido, recriminarle su trabajo es una forma de dudar de su capacidad.
Un hombre, en cambio, puede preguntar cosas como: “¿Si no te gusta, por qué no renuncias?”, e igualmente cuestionar a su pareja.
Conversen con frecuencia los temas en torno al empleo, así como las ambiciones profesionales de los dos. Es una oportunidad para hablar sobre su estilo de vida y cómo quieren vivir.
3. “Mi mamá me advirtió que me ibas a hacer esto”
No permitas de ninguna manera que las opiniones de terceros influyan en tu relación, en este caso, familiares, y hacer comentarios vanos como éste. Mucho menos debes gritárselo a tu pareja en la cara. Tú lo elegiste (o la elegiste), nadie más. Hazte cargo.
4. “Déjalo, mejor lo hago yo”
¿Realmente los esfuerzos de tu pareja están por debajo de los tuyos? de acuerdo con Ford, es pernicioso para la relación de pareja, pues se humilla el desempeño del otro.
Si esta situación se da con frecuencia, tu pareja pensará que es inservible o inutil para realizar diferentes actividades. Lo mejor en este caso, es que si la persona está realizando una actividad mal, brindes ayuda, explicando cómo se realiza, o corregirlo si está equivocado, pero no lo hagas tú.
5. “Tú siempre … ” / “Tú nunca …”
Estás son frases que la mente interpreta inmediatamente en tono negativo, y por ende, termina la comunicación, pues pone a la otra persona a la defensiva.
Según Ford, estas afirmaciones hacen que la otra persona se sienta atacada. Ve directo al punto principal del problema y no generalices. Si la situación se presenta constantemente, necesitas hablar con tu pareja y hacerle saber cómo te sientes y si está dispuest@ a cambiar esa actitud. Si pides las cosas con amabilidad –más aún en una pareja, si es con amor–, la otra persona seguramente lo tomará en cuenta.
6. “Creo que esa ropa no te favorece”
¿Realmente crees que es adecuado decirle esta frase a tu pareja? Un comentario así puede interpretarse como insulto, y afecta su autoestima. Si quieres mostrar interés por su apriencia, lo mejor es señalar lo bueno. Si decides que señalar algo sobre su apariencia es importante, intenta decir las cosas de una manera natural, sin ser groser@.
7. “Mmmm, ¿saldrás con ell@s de nuevo?”
Es de pésimo gusto criticar las amistades de tu pareja, si bien no estás obligado fingir que te simpatizan o peor aún, quererlos. Tu pareja tiene derecho a elegir a sus amigos libremente sin pedir autorización de nadie. Cada quien elige libremente a sus amistades. El hecho de estar casados o vivir juntos, no impide tener actividades por separado; cada quien debe tener su espacio y éste debe ser respetado.
El equilibrio se logra formando amistades en común con las que ambos pueden compartir salidas y actividades.
